¿Cuáles son los problemas de lectura más frecuentes en los niños?

Los problemas de lectura en los niños son muy comunes; sin embargo, deben solucionarse lo más pronto posible para que el aprendizaje del niño sea óptimo. Los niños atraviesan diferentes fases para aprender a leer, las cuales son:

  1. Logográfica, en la que empieza a entender imágenes y logos, al igual que su significado.
  2. Alfabética, en la que el aprendizaje de lectura es un poco más avanzado, y empiezan a intentar leer.
  3. Ortográfica, en la que la lectura del niño ya comienza a ser muy buena, entendiendo las letras y las palabras.
  4. Expresiva, en la que el niño ya sabe leer de forma perfecta y fluida.

Durante las fases de aprendizaje, los niños suelen presentar algunos problemas. Lo que debes hacer es solucionarlos rápidamente para que el niño lea de manera correcta. Los problemas de lectura más frecuentes en los niños son:

Lectura con trastornos

El niño suele tener problemas de repetición de las palabras constantemente. Se divide en cuatro tipos:

1- Arrastrada

Cuando el pequeño lee, empieza a omitir palabras porque tiene algún tipo de fallo en su visión. Es muy similar a la tartamudez. La solución más acertada es llevarlo a un oculista para que determine si el niño tiene algún problema en su vista.

2- Repetida

El niño comienza a repetir la primer sílaba de cada palabra varias veces, y muy difícilmente la termina de decir. nAyúdalo con ejercicios en los que logre más fluidez al momento de leer.

3- Repetida silenciosa

Realiza repeticiones en voz baja o, en ocasiones, mentalmente para luego leer de forma adecuada. Lo más prudente es apoyarlo y repetir con él todas las palabras durante algún tiempo.

4- Mixta

El pequeño constantemente comete las mismas fallas de arrastrar y repetir. Te recomiendo llevar a tu pequeño a donde un oculista para que descarte daños en la visión.

Lectura con fallas de ritmo

El niño suele fallar en la velocidad de la lectura, pues en ocasiones lo hace lento, a veces rápidos, y otras veces lo combina. Este tipo de problema se divide en tres clases:

Bradiléxica

El niño aprende a leer, pero lo hace bastante lento y tiende a aburrirse un poco. Lo único bueno de este tipo de problema es que, la mayoría de veces, los niños no cometen errores, ya que únicamente afecta su velocidad al leer. La mejor solución es ayudarlo a que trate de ser más rápido con algunos ejercicios. Por ejemplo, colócalo a leer algo y utiliza un cronómetro para que acabe justo antes de que suene. Eso puede ser divertido para ti y para él.

Traquiléxica

Este tipo de dificultad suele ser todo lo contrario a la anterior, pues el pequeño lee tan rápido que no se le logra entender nada. Eso es muy malo para él, ya que tampoco entenderá nada, y el objetivo es que entienda lo que lee.

Enséñale la importancia de las pausas y los signos de puntuación, así podrá leer de forma más lenta y entenderá todo fácilmente. Además, enfócate en que respire bien cuando lo realice en voz alta.

Disrítmica

La disrítmia es un problema de lectura en el que el niño lee bastante rápido y no respeta los signos de puntuación, por lo que, luego de leer, termina sin entender. También se le conoce como lectura desordenada y es, prácticamente, una combinación entre la Bradiléxica y traquiléxica.

Para solucionarlo, debes enseñarle la importancia de las comas, puntos, punto y coma, etc, así él empezará a leer mejor. También enséñale que tomar una pausa en la lectura es muy bueno para que él entienda mejor lo que lee.

Lectura con fallas de conocimiento

En este tipo de lectura los niños tienen un fallo en la memoria y terminan inventando la historia, en vez de leerla.

Amnésica

El niño escucha varias veces el texto leído por otra persona y comienza a aprenderlo de memoria. El error en este tipo de lectura es que si le pides que lea únicamente una frase, lo más probable es que no lo logré hacer.

Imaginaria

El niño no sabe leer, por lo tanto inventa todo el texto. En el caso de que hayan imágenes, se basará en eso para inventar.

Lectura disléxica

Con este problema de lectura el pequeño trata de leer bien, pero en ocasiones omite algunas letras o sílabas, porque comienza a leer demasiado rápido. Se igual forma, confunde el orden de las letras.

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