La Teoría del Aprendizaje Social

Todo el mundo está constantemente aprendiendo cosas nuevas y en este proceso necesitamos un entorno que haga de este proceso algo más ameno. De esta forma, se puede ver que la sociedad influye en la forma en que el alumno adquiere conocimientos. Es decir, lo que aprende del entorno y cómo lo aprende.

En este sentido, durante muchos años se ha estudiado la forma como los seres humanos adquirimos conocimientos y por ello se han desarrollado diferentes teorías de aprendizaje. Estas teorías se denominan teorías cognitivas y comprenden diversas hipótesis, entre las que los procesos psicológicos son la base de todo.

Estas se dividen en cognitivo-social y cognitivo-conductual. De hecho, las teorías más famosas incluyen: Aprendizaje significativo expuesto por David Ausebel, predecesor de la teoría de la psicología genética Jean Piaget, padre Albert Bandura (Albert Bandura) y Teoría del aprendizaje social propuesta por Led Vigotskyy de Bandura.

¿Qué es la teoría del aprendizaje social?

Esta teoría fue propuesta por el psicólogo Albert Bandura en 1977 y sostiene que el aprendizaje considera aspectos sociales cotidianos. En este sentido, el aprendizaje tiene lugar en un entorno social y se produce a través de la observación.

La teoría del aprendizaje social explica cómo los humanos aprenden a través de la experiencia observada. Es decir, los individuos aprenden del comportamiento de sus compañeros.

Todos vivimos en sociedad, por lo que tienen una conexión que afecta su comportamiento y cosmovisión, por lo que el aprendizaje ocurre a través de la observación, aunque no hay refuerzo positivo.

¿Cómo surgió la teoría del aprendizaje social?

La teoría del aprendizaje social se verificó a través de un experimento llamado «Popbo Doll» realizado por Bandura. El experimento demostró que exponer a los niños a la violencia puede hacer que se vuelvan niños agresivos.

El experimento procedió de la siguiente manera:

Se crearon tres grupos de niños, un grupo de niños observó a adultos jugando con muñecos, el segundo grupo solo vio acciones no agresivas de jugar con muñecos. El último grupo no observó ninguna acción relacionada con muñecos.

¿Qué causó esto? En el primer grupo de niños, los niños que observaron violencia contra la muñeca comenzaron a comportarse agresivamente y crearon otras formas de abusar de la muñeca. Por otro lado, el segundo y tercer grupo que presenciaron comportamientos no violentos no fueron agresivos en absoluto. Al contrario, jugaron o ignoraron muñecos.

A lo largo de los años, se recreó el experimento, esta vez utilizando la televisión para evaluar si se obtenían los mismos resultados. No obstante, una vez que el grupo de niños está expuesto a proyectos violentos y no violentos, los resultados son similares al primer experimento.

Por tanto, los resultados muestran que es posible que los niños aprendan por observación y consoliden la teoría del aprendizaje.

Principios del aprendizaje social

Albert Bandura derivó de su investigación los principios que describen de manera integral el aprendizaje social y nos permiten comprenderlo:

La concentración:

La concentración es necesaria para aprender y, por lo tanto, es necesario prestar atención. Por ello, cuando a los niños se les enseña de forma divertida, se sentirán atraídos, por lo que se centrarán en todo el curso.

La retención:

La información se almacena en la memoria cuando se internaliza y analiza. En este sentido, los niños solo tienen habilidades analíticas con los temas desarrollados y adaptados a su edad. De hecho, a través de actitudes observacionales adaptados a su edad pueden retener ciertos comportamientos y repetirlos más tarde.

La copia:

Se refiere al uso de la información obtenida a través de la atención y retención. Por ello, cuando quieres explicar algo, el cerebro activa la memoria relacionada con el tema que quieres explicar.

Un ejemplo de ello es cuando haces un examen. Es decir, para aprobar el examen, primero debes concentrarte en el aula, internalizar el tema y luego reproducirlo en la evaluación.

La Motivación:

Mantener a las personas motivadas es saber recompensarlas. Por ello, según esta teoría, cuando se observa que otra persona es elogiada o recompensada por ciertos comportamientos, surge la motivación.

Por ejemplo, cuando un adolescente observa que a su vecino se le permite salir mientras hace las tareas del hogar, imitará este comportamiento para que él también reciba la recompensa.

Refuerzo positivo o negativo:

Bandura explicó que el aprendizaje está asociado a un proceso de refuerzo positivo o negativo, por lo que el entorno influye continuamente en el desarrollo del aprendizaje. En este sentido, los factores ambientales y cognitivos se entrelazan e inciden en el proceso de aprendizaje social en términos de refuerzo positivo o negativo.

Ambiente:

En toda sociedad hay un contexto, por lo cual se está directa o indirectamente influenciado o presionado por los estándares que exigen. En consiguiente, muchos de los objetivos del aprendizaje individual se ven orientados por la presión social.

Un ejemplo claro son las tradiciones familiares. Por ejemplo, muchas familias por generaciones se dedican a una actividad específica y esto sucede porque los padres orientan desde niños a sus hijos en ciertas actividades. El fin de ello es mantener la llamada “tradición familiar”.

El factor Cognitivo:

El individuo o aprendiz no es un sujeto pasivo, el cual participa conscientemente en el proceso, ya que tiene expectativas de lo que puede ocurrir.

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